Una vez amé

Una vez amé.

6.18.2013

Que el vacío sea momentáneo.

Carta para un Pasado:

'—No te necesito, no necesito a nadie.' Se oían los ensordecedores gritos del silencio por toda aquella oscura e inmensa casa. Las paredes, agrietadas por el paso de los años, iban acorde con el alma de su dueño. Colores grisáceos que penetraban como calientes balas directas a la sensibilidad de todo ser que se paraba, aunque sólo fuera por un segundo, a contemplarlas. 
Una sombra alargada salía de lo más bajo de su espalda, arrastrándose por la vida creyendo tener el derecho de elegir amores, enemigos o amistades. Una sombra que había absorbido toda capacidad de vivir que alguna vez tuve.


'—¿Qué debo hacer?' Es algo que siempre me pregunté, una y otra vez. Las noches llenas de silencio nunca fueron bienvenidas en mi cama, como tampoco lo fueron aquellos cuerpos ajenos que ni tan siquiera consiguieron calentarla. Tocaban mi alma, mi cuerpo. Sin embargo lo único que brillaban en sus ojos era el reflejo del frío invierno en el que se había convertido mi vida. Cuán incómodo me resultaba ser aquel trozo de hielo que lo único que buscaba era un cuerpo al que aferrarse, aunque sólo fuera durante unas horas, para sentirme un poco más hombre. Más humano.
'—¿Crees en la vida después del amor?' No lo sé, durante mucho tiempo ni siquiera supe en qué consistía aquello a lo que muchos llamaban 'vivir'. Probablemente siga aún a día de hoy sin saberlo, ni tan siquiera imaginarlo. Pero qué más da.
En ocasiones he abandonado la esperanza de ver en unos ojos ajenos el ansia de mi propia alma, las ganas de devorar mi propia sombra. He querido gritar que ya no duele, que fuiste un pasado que, por suerte o por desgracia, llegó y se fue con la misma facilidad. Que ahora Soledad ha dejado de ser mi alma gemela para convertirse en un simple recuerdo más. He querido gemir de placer en noches llenas de comportamientos animales, de sucios y apetecibles deseos que me hacen sentir más vivo que nunca. He querido decir, y lo haré algún día, con la prepotencia más absoluta y la sinceridad más grande, que he encontrado a alguien. Y entonces, verás derretir aquel frío humor que emanaba mi cuerpo y mi vida. 


'Que el vacío sea momentáneo y la vida un simple juego'.

@Srta_Massoni.